A veces nos pasa que Dios nos usa de una manera tremenda y al finalizar el culto dice uno Wow! Algo debí haber hecho bien! Luego estamos en otro lugar y no sucede lo mismo, y nos preguntamos que pasó? Si hice todo igual! Habré pecado, habrá algún pecadillo oculto que no limpie durante mi tiempo de preparación? No!!!  Nunca pongas tu vista en las glorias pasadas por que esto puede traer duda, confusión, frustración y tristeza recuerda que Dios hace lo que quiere, cuando quiere y donde quiere! En la Biblia encontramos una historia que habla de gente que cometió este error, dice la palabra en (Esdras 3: 10-13) que estaban los Israelitas después de haber sido liberados del cautiverio babilónico poniendo los cimientos para reconstruir el templo que Salomón había edificado, y que a causa del pecado de su pueblo había terminado siendo destruido por los enemigos, dice la palabra que mientras se llevaba a cabo la obra, unos reían y otros lloraban, por que lloraban? Dice a Biblia que lloraban por que tenían su mente alojada en el pasado, ellos recordaban la gloria portentosa que revestía al templo y tal vez pensaban que esa gloria jamás volvería a ellos. pero otros reían, por que reían? Por que para ellos este evento simbolizaba algo más grande que la gloria pasada, una nueva oportunidad de vivir en comunión con Dios, simbolizaba el fin de la esclavitud y el inició de una nueva etapa. Sabes en Dios todo es nuevo, lo pasado ya no existe y dice la palabra que la gloria postrera será mayor que la primera, así que la próxima ves que Dios te use de manera impresionante solo dile gracias por que tu haces lo que quieres y comienza de nuevo cada día buscando su presencia y poniendo tu mente en lo que viene.

Aportación SLA

 

 

 

Dice la palabra que lo que es nacido de la carne, carne es pero lo que es nacido del Espíritu espíritu es. En cierta ocasión estaba a punto de predicar cuando de repente el Señor me cambió el mensaje y fue de tal bendición que quedé impactado por dos cosas 1º la manera en que Dios puede derramar sobre de uno su palabra, al punto que en un solo instante el mensaje y su orden homilético fueron puestos en mi por eso dice la palabra que somos vasos en los cuales Dios derrama de su unción. A veces el señor, con anticipación nos da el texto o la cita ha predicar pero es tarea de uno el seguir buscando en oración el enfoque que Dios quiere darle a ese texto, en la medida en que cada parte del mensaje sea obtenida de manera inspirada por Dios, el resultado será mayor. No olvidemos que lo que ha nacido de la carne impacta a la carne pero lo nacido del Espíritu impacta al espíritu. Es algo muy sutil que casi nadie percibe, es decir, la diferencia entre un mensaje obtenido del intelecto y otro del espíritu, si bien la palabra tiene en si poder, es mayor su impacto cuando nos aseguramos que sea un mensaje espiritual. Nuestra sociedad y el pueblo cristiano necesita predicadores que tomen directamente del corazón de Dios la palabra para su pueblo pues de esta manera su impacto espiritual está asegurado.

Aportación SLA

 

 

No dudo que has estado viendo la gloria de Dios en tu vida y ministerio, cuando antes pasabas desapercibido ahora tienes buen nombre, no dudo que antes la gente ni sabia como te llamabas pero ahora Dios te ha puesto en lugar privilegiado, no dudo que antes cuando tus amigos te veían huían de tu presencia por que solías pedir prestado y que ahora la gente te llama para darte una ofrenda o hacerte un regalo, no dudo que cuando predicas ves la poderosa mano de Dios moviéndose en tu vida, y no dudo que cuando la gente te ve diga ese hombre (mujer) tiene algo que lo hace especial, y no lo dudo por que sé que a Dios le ha placido honrarte. En el libro de Ester 6:1-12 vemos una historia que relata cando el rey Asuero recordó que Mardoqueo le había hecho un gran favor y pregunto que honra debía darse a ese hombre, la respuesta que aman refirió al rey involucraba el mas alto grado de honores al que un hombre aspira recibir, así que el rey mandó que inmediatamente se hiciera así con el hombre cuya honra deseaba el rey, pero lo que me sorprende en la palabra es que después de que mardoqueo fue honrado de esa manera el simplemente volvió a la puerta del rey, que significa volver a la puerta del rey? Significa que después de ser honrado y ver su respaldo y su gloria, nunca te olvides de ser humilde y seguir buscando su cobertura con un corazón sencillo.

Aportación SLA

 

 

 

Declarar tu victoria, es que durante tu tiempo de preparación, tú, en oración declares a través de la fe exactamente lo que quieres que suceda en el lugar donde vas a predicar. Declarar tu victoria es lo que hizo David cuando estuvo delante de Goliat (1 Samuel 17:46) en donde vemos que al estar David delante del filisteo no se atemorizó si no que declaró exactamente como derrotaría al gigante, sabiendo que Dios le respaldaría. Y es impresionante ver que de la manera en que el declaró que sucedería, Jehová le contestó. Declarar tu victoria es como la estrategia militar en donde los oficiales de alto rango planean el ataque y lo visualizan de tal manera que no dejan nada al la improvisación.

Aquí te presento una lista de cosas que tu puedes declarar, solo como ejemplo. dependerá de la medida de tu fe.

 

(NOTA declarar tu victoria puede ser también a manera de clamor)

Aportación SLA

 

El que tiene un llamado al ministerio de la palabra ha dejado todo en segundo termino con tal de atender fielmente su deber, vivir para la palabra, no quiere decir que no tenga otras ocupaciones (aunque sería lo ideal) si no que en su mente y corazón lo mejor de su tiempo y aún, una buena parte de éste, está totalmente enfocado en ello. Organizar tu vida en este orden traerá resultados positivos a tu ministerio.

Aportación SLA

 

La predicación es un trabajo conjunto entre el Espíritu Santo y el predicador, al hombre le corresponde;

Previo al día “D”

 

1. Adoptar o diseñar un buen método para la elaboración de sus mensajes.
2. Mantener un estudio sistemático de las escrituras,
3. Estudiar continuamente las problemáticas del ser humano.
4. Tener un interés real y profundo por producir cambios verdaderos en sus oyentes,
5. Llevar una vida tranquila, limpia, saludable y organizada que no robe la paz de su corazón. y contriste al Espíritu santo.
6. Vivir en consagración y pasar largos ratos de oración y clamor por aquellos a quienes pretende ministrar.
7. Saturarse de la presencia de Dios.
8. Buscar en oración el mensaje que Dios quiere dar.
9. Conocer perfectamente el objetivo por el que ha de luchar con ese mensaje.
10. Pelear en el ambiente espiritual por sus oyentes.
11. Declarar de antemano tanto la victoria como lo que quiere que acontezca durante su predicación.
12. Desarrollar en oración una convicción total de lo que Dios hará en el lugar.

 

El día “D”

1. Haber planeado y organizado todo con anticipación para evitar carreras o contratiempos.
2. Guardar la paz en el corazón
3. Estar enfocado en el mensaje que va a entregar.
4. Mantenerse tranquilo y confiado de que Dios hará su voluntad.
5. Estar atento y sensible a lo que Dios quiera hacer durante la ministración.
6. Rodearse de gente que entienda la importancia que tiene su tranquilidad.

 

 

De lo difícil se hace cargo el Espíritu santo, pues a Él le toca;

 

Aportación SLA

 

 

 

Jonh wild corría con lo que le quedaba de fuerza por llegar en primer lugar, había sido un largo camino de preparación, meses y meses de entrenamiento y sacrificio, por fin estaba ahí, a solo 30 metros de la meta, los casi 5000 metros recorridos le habían quitado toda su energía y detrás de él, a unos pasos, su contrincante más férreo, que le daba alcance poco a poco, por fin, sacando fuerzas de debilidad logro cruzar en primer lugar, la gente le ovacionaba mientras el caía desvanecido por el tremendo esfuerzo realizado. 

A la mayoría de los ministros actuales les pasa lo mismo, al ponerse como meta realizar una campaña evangelística, pasan meses de preparación visualizando ese momento y cuando terminan, simplemente caen desvanecidos por el esfuerzo realizado olvidándose que la campaña solo representa la mitad del camino.

En la evangelización de las almas la campaña evangelística no es la meta en sí, ésta solo representa la mitad del camino, la verdadera meta es producir un creyente maduro y perfectamente integrado al cuerpo de Cristo.

La siguiente vez que organice una campaña;

 

Ha! Olvidé mencionarlo, el hombre que llegó en segundo lugar, al cruzar la meta festejó dando una Vuelta más a aquel campo, contento con el puesto que había ganado. Para mi, campeón, no es aquel que alcanza sus metas para luego dormirse en sus laureles o caer desvanecido por el tremendo esfuerzo realizado, si no aquel que después de haberlo logrado pone su vista en lo que sigue y simplemente sigue corriendo.

 

Aportación SLA.